viernes, 5 de septiembre de 2008

Personalidad múltiple o bipolaridad

Esta mañana leí un artículo que me ha dejado algo contrariada y he decidido comentarlo, después de siete intensos meses sin aparecer por estos lares. Paso a recoger su contenido:


"¿Poca autoestima?: te gusta la música 'indie'
REUTERS - Londres - 05/09/2008


Los aficionados a la música clásica y el jazz son creativos; los amantes del pop trabajadores y, a pesar de los esterotipos, los fans del heavy metal tienen un carácter suave. Es lo que afirma el profesor Adrian North, de la Universidad Heriot-Watt de Escocia, que ha estado estudiando las relaciones entre personalidad y gustos musicales.

"La gente a menudo define su sentido de la identidad a través de su gusto musical, sus prendas de vestir, la elecciones determinados bares para salir o el empleo de ciertas palabras del argot", señala North. "No es raro pensar que la personalidad pueda estar vinculada a las preferencias musicales", añade.

En lo que supone, según North, la mayor investigación sobre gustos musicales y personalidad, los científicos preguntaron a más de 36.000 personas de todo el mundo para evaluar cuánto les gustaban 104 estilos de música diferentes
"Los investigadores han mostrado desde hace décadas que los aficionados al rock y al rap son rebeldes, y que los fans de la opera son prósperos y bien educados", señala North, quien añade que "ésta es la primera vez que un estudio muestra vínculos entre la personalidad y el gusto por un amplio abanico de estilos musicales".
Jazz, blues...


El estudio concluye que aquéllos que se decantan por el jazz y la música clásica son creativos y tienen una alta autoestima, aunque los primeros son extrovertidos y los segundos tímidos. Los aficionados al country tienden a trabajar duro y a la timidez, mientras que los fans del rap son extrovertidos y los amantes de la música independiente carecen de autoestima y son huraños. Aquéllos a los que les gusta el soul pueden animarse: el estudio afirma que son creativos, extrovertidos, dulces y contentos consigo mismos y que, además, tienen la autoestima alta.

Si alguna vez usted se ha preguntado por qué los conductores de coches deportivos caros suelen escuchar música a todo volumen, North puede ofrecer una explicación: Los que escuchan música machacona son más propensos a pertenecer a una horquilla de ingresos elevados, mientras que aquéllos que escuchan sonidos relajantes tienden a situarse en la parte baja de la escala de sueldos.

North sigue buscando voluntarios que quieran participar en su estudio. Más detalles en www.peopleintomusic.com"

Si tuviese el gusto de poder charlar con este profesor, le preguntaría qué pasa con la gente que mostramos interés por diversas corrientes musicales. De un lado, me fascina la música clásica y el jazz. Por lo que, según este "interesante" estudio soy creativa y poseo alta autoestima. Además, me encanta el pop; así que, soy una persona trabajadora. Al igual, me pasa con el soul, compartiría, pues, las características englobadas en "creativos, extrovertidos, dulces y contentos consigo mismos y que, además, tienen la autoestima alta". Hasta aquí, las conclusiones sobre mi personalidad no son mutuamente excluyentes. Pero.... cuando llego al párrafo donde se enuncia: "los amantes de la música independiente carecen de autoestima y son huraños", no me queda otra: ¡tengo personalidad múltiple o soy bipolar!

Voy a echarle un vistazo a la página web referenciada. A ver si me puede ayudar a dilucidar en qué consiste exactamente mi problema, ofreciéndome como voluntaria. Quizás, el problema radica en hacer estudios demasiado parciales.

viernes, 11 de enero de 2008

La proeza de ser joven y vivir solo
El alquiler aparece como una de las pocas alternativas a la emancipación
(ELPAIS.com LL. PELLICER/C. SÁNCHEZ-SILVA - Madrid - 11/01/2008)

Las más de 300.000 descargas de solicitudes de ayudas al alquiler que en una semana ha recibido el Ministerio de Vivienda dan fe de las dificultades de los jóvenes para acceder a un piso. En especial los de la horquilla de edad e ingresos que prevé el departamento que dirige Carme Chacón, entre 22 y 30 años y con un salario bruto anual de menos de 22.000 euros.

Según los cálculos del Gobierno central, unos 360.000 jóvenes españoles se encuentran en estas circunstancias y, por tanto, tendrán derecho a la subvención a la renta de 210 euros mensuales. De momento, la Comunidad de Madrid está tramitando 4.323 solicitudes, las que se han presentado entre el 2 y el 9 de enero.

Ante el alud de interesados por la ayuda, Chacón ya ha aclarado que "no hay límite de tiempo para presentar la solicitud y que los jóvenes pueden hacerlo cuando más les convenga" y ha recordado que no existe un límite en la concesión de ayudas. "Si lo piden el doble [de los previstos], serán el doble de ayudas", afirmó la ministra, quien añadió además que las primeras subvenciones empezarán a percibirse por parte de los jóvenes en febrero.

De entrada, los precios de la vivienda se han disparado en los últimos diez años, a un ritmo muy superior al que lo han hecho los salarios. Según un estudio de Adecco, en términos reales (descontada la inflación) los sueldos han crecido un 1,4% desde 1997, sobre todo por la caída de la productividad.

En cambio, la vivienda en los últimos siete ejercicios se ha encarecido más del 120%. Esta diferencia explica por qué si en 1977 podía emanciparse algo más del 40% de la población, ahora sólo hace poco más del 30%, según el Consejo Económico y Social.

Emancipación imposible
De la misma forma se pronuncia el Observatorio Joven de Vivienda (Objovi) del Consejo de Juventud de España: si un joven no se emancipa o no compra un piso es, simplemente, porque no cobra lo suficiente. Según su último informe, un joven español necesitaría unos ingresos mínimos anuales de 36.678,27 euros para adquirir una vivienda en el mercado libre, cuando el salario medio real es de 16.225,46 euros. Es decir, debería cobrar un 126% más.

En la Comunidad de Madrid una persona de hasta 35 años, debe reservar el 82,1% de su salario para hacer frente a las cuotas de una hipoteca media, frente al 67,8% del sueldo que tiene que destinar un joven en el conjunto de España. En Barcelona el esfuerzo llega al 82%. El endeudamiento para un madrileño de entre 18 y 24 años, sostiene el Objovi, llegaría a ser "totalmente imposible", puesto que debería entregar el 107,8% de sus ingresos.

Hay consenso, también entre la mayoría de las entidades financieras, en que "el precio máximo tolerable" para sufragar una vivienda ?sin poner en riesgo financiero la economía personal o familiar? se sitúa entre el 30% y el 35% de los ingresos anuales.

Pues bien, para un joven madrileño con un salario medio (19.507 euros) este límite está en los 109.269 euros, mientras que para una pareja de entre 18 y 35 años está en 192.778 euros. Atendiendo a los datos de Sociedad de Tasación, un joven, tanto si vive solo como en pareja, ya puede quitarse de la cabeza la obra nueva. En las provincias de Madrid y Barcelona, un piso de 80 metros cuadrados le costaría cerca de 214.800 y 363.000 euros, respectivamente. Si fuese en la capital española ese importe subiría hasta 317.680 euros. La vivienda de compra es, pues, casi privativa para un joven que quiera emanciparse.

Este diario ha buscado en los cinco principales portales inmobiliarios, incluido el de los agentes de la propiedad, cuál es la oferta de compra en las provincias de Madrid y Barcelona por estos precios y dónde está. En la capital española de los cinco portales, sólo tres tienen oferta tan asequible, eso sí, en el que menos pisos disponibles hay se cuentan 10 y en el que más 23, que llegan hasta 64 productos si se amplía la búsqueda a la comunidad madrileña. Claro que se trata de pisitos de 16 a, como mucho, 40 metros cuadrados de superficie, que en general son interiores, bajos o sótanos y, además de antiguos, no suelen tener ascensor.

En la práctica, los alquileres medios que se pagan en ambas ciudades se mueven entre 700 y 900 euros. Con lo que tampoco es fácil conseguir alquiler.

Un estímulo
A juicio el catedrático de Política Económica de la Universidad de Barcelona, Antón Costas, que reconoce que al principio era pesimista respecto a las ayudas directas que ha puesto en marcha el Ministerio de Vivienda, que consideraba inflacionistas al trasladarlas directamente el propietario al inquilino, ahora las estima apropiadas porque el mercado ha cambiado de forma radical en los últimos meses y pueden contribuir a la emancipación de los jóvenes.

Para el representante de Grupo i también son acertadas y servirán para que esta fórmula de acceso a la vivienda que en España sigue siendo marginal gane peso, pero serán necesarias otras medidas para que realmente la mejora sea de envergadura, tales como crear un parque de pisos en alquiler, que incluya viviendas nuevas protegidas, ofrecer seguridad a los propietarios de casas de segunda mano para que las arrienden, etcétera.

Lo ideal, en opinión de los expertos, es que el parque español en arrendamiento pasara del exiguo 10% actual al 20%. Algo que podría conseguirse a medio plazo y que parece que es lo que están intentando los gobiernos centrales, autonómicos y locales, orientando sus políticas de vivienda hacia el alquiler, en lugar de hacia la compra. "Hay que potenciar el alquiler porque es el camino hacia la emancipación", sentencia Costas.

A la luz de los datos anteriores, nadie puede negar que independizarse es una tarea más que ardua, casi imposible. Se habla de un salario medio anual (para los que lleguen a él, que es más deplorable aún; de la precariedad laboral, ni hablemos).

Respecto a las opiniones vertidas por el catedrático D. Antón Costas, estoy totalmente de acuerdo con él. Desde mi punto de vista, los inquilinos sólo sirven como catalizador de las ayudas a los propietarios, ya que empiezan a ser latetes las subidas de los precios de los alquileres. Algunos propietarios tienen una desfachatez inconmensurable.
Otro tema es la cuantía y requisitos de la ayuda a la vivienda. Manda eggs....

En definitiva, mi madre tendrá que aguantarme algún tiempo más, teniendo en cuenta que no hay visos de que la situación mejore. Es más, me temo que entraremos en una etapa de recesión y los salarios no subirán ni un ápice; mientras, los precios subieeeendo (como diría mi amigo, el de Intereconomía....).

Una de dos, cambiamos de mentalidad y nos "mimetizamos", más si cabe con los americanos, con la consecuente intensa competitividad desde el colegio o, espabilamos y dejamos de ser unos borregos, reaccionando ante lo que nos está tocando vivir. Iré buscando contactos en EE.UU....
Porca miseria.....